La capital del Eslovaquia es una pequeña ciudad ubicada a orillas del río Danubio. Entre los Alpes y los Cárpatos, está a muy pocos kilómetros de la ciudad de Viena. Bratislava, ciudad de contrastes, es muy tranquila, y aunque turísticamente hablando no está muy desarrollada, si viajas por centro Europa es parada obligatoria.
Bratislava, ciudad de contrastes, es rica en historia y cultura. En ella queda la huella de asentamientos celtas, romanos, turcos, eslavos, húngaros, …
Bratislava es una ciudad rica en historia y cultura. Sus primeros asentamientos fueron celtas en el siglo II a.c., posteriormente han pasado romanos, turcos otomanos, eslavos, húngaros. Todas estas culturas han dejado huella en la ciudad. Más recientemente, su pasado comunista y en la actualidad miembro de la Unión Europea, hace que esta ciudad esté abierta al cambio y al progreso.
Cualquier época del año es ideal para visitarla y disfrutar por el casco viejo de la ciudad y deleitarse con su rica gastronomía.
Pero sin duda y en nuestra opinión, la mejor época del año en la que Bratislava brilla más que nunca es en Navidad. Las luces navideñas ubicadas en el centro histórico de la ciudad son únicas.
Bratislava en Navidad (video)
En Navidad la visita obligada en Bratislava es el Ayuntamiento situado en la Plaza Mayor de la ciudad (Hlavné Neméstie). Data del siglo XV. En esta plaza se ubica cada año el Mercado de Navidad de Bratislava (Vianocné Trhy Bratislava). En él se reparten más de 100 puestos en los que se pueden adquirir todo tipo de regalos navideños. Además hay numerosos puestos que ofrecen productos gastronómicos típicos del país, como la carne asada eslovaca, las salchichas, sopa de col, panqueques, etc.
Asimismo en Navidad la oferta cultural es muy diversas. Se organizan conciertos, bailes populares, espectáculos dirigidos a niños, danza, etc. Estos se celebran en la plaza principal.
Además de los eventos navideños, si viajas a Bratislava deben visitar estos lugares que te recomendamos:
Opera de Bratislava: Es, en nuestra opinión, el edificio más bonito de la ciudad. Situado en la plaza Hviezdoslavove námsitie. De estilo neo-renacentista, te impresionará tanto su fachada como su interior.
Su casco antiguo: Perderse por sus callejuelas y plazas, rodeado de edificios de estilo gótico, barroco, etc.
Castillo de Bratislava: Este antiguo castillo (siglo X), es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Actualmente funciona como una de las sedes del Museo Nacional Eslovaco. Vale la pena visitarlo para disfrutar de las impresionantes vistas de la ciudad y sus jardines.
Cualquier época del año es ideal para visitarla, para perderse por las calles del casco antiguo de la ciudad
Puerta y Puente de San Miguel: Es la única torre medieval que se conserva de la muralla que protegía a la ciudad. En su interior hay un museo de armas medievales. Es uno de los símbolos de la ciudad. Nada más salir de la Puerta de San Miguel nos encontraremos con el Puente del mismo nombre.
Palacio del Primado (Primaciálny Palác): Situado detrás del Ayuntamiento, es un edificio que te impresionará por su decoración de estilo neoclásico.
Su arte urbano es una atracción turística que la diferencian de otras capitales europeas
Asimismo, disfruta de su arte urbano. Las innumerables esculturas que representan personas en acción, repartidas por sus calles, son una atracción turística que diferencia a la ciudad de otras muchas del centro de Europa.
Y por último, si eres amante de la noche, no te puedes perder la intensa vida nocturna de la ciudad. Al ser una ciudad universitaria (posee 8 universidades y en torno a los cincuenta mil estudiantes) la convierte en una ciudad joven. Además de esto, el carácter eslovaco es muy afable y abierto con la gente.